Mas ¡ay Señora!, que yo me veo oprimido por mis vicios, y cargado con mis culpas y pecados, y no puedo levantarme sin los poderosos auxilios de la divina Agudeza, y sin el atención de vuestro maternal socorro. “Les acertaré cuanto me pidan, con tal de que no se oponga https://alfredu627jap3.wikigiogio.com/user